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El pasado 25 de julio, Carlos Ochoa, secretario general del Sindicato de Estudiantes de Sevilla, fue detenido en su casa por un fuerte dispositivo policial de agentes encapuchados, que le llevó a comisaría a declarar sobre su participación en la acampada por Palestina de la Universidad de Sevilla.

Esta acción vuelve a colocar a la juventud combativa en el punto de mira de la represión del aparato del Estado. Están decididos a machacar por todos los medios, con montajes policiales y judiciales o directamente mediante la intimidación represiva, a quienes no se resignan a callar ante los abusos y crímenes de los poderosos de turno.

Por eso los antidisturbios desalojan a palos las acampadas contra el genocidio sionista y sus brigadas de información detienen como si fueran peligrosos delincuentes a sus activistas más destacados. Por eso la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quiere imponer un régimen de terror en las universidades públicas igual que hizo la dictadura franquista, o la Universidad de Sevilla abre expedientes disciplinarios a dos afiliados del Sindicato de Estudiantes por denunciar públicamente a un profesor machista y acosador.

Por eso también en Catalunya tres activistas de la SEPC han sido detenidos por su participación en movilizaciones estudiantiles en defensa de la educación pública, y en Nafarroa siete jóvenes enfrentan penas de 20 años de cárcel y multas por valor de 56.000 euros por luchar contra un proyecto de especulación inmobiliario que lograron frenar mediante la movilización. Hay más. Los ejemplos de las seis sindicalistas de la Suiza, los jóvenes antifascistas de Zaragoza encarcelados por manifestarse contra Vox, los años que lleva entre rejas Pablo Hassel por cantar las verdades de la monarquía corrupta, o los jóvenes de Altsasu, víctimas de una conspiración de los tribunales y la guardia civil para arrojarlos impunemente a prisión…


Las personas, colectivos y organizaciones abajo firmantes queremos mostrar nuestra profunda indignación ante estas acciones represivas, muchas de ellas amparadas por este Gobierno que se dice el más progresista de la historia, y que no buscan otra cosa que amedrentar a quienes luchamos contra el genocidio en Gaza o por los derechos sociales y laborales de todos y todas.

Por eso exigimos la retirada de cualquier cargo o acción legal contra el compañero Carlos Ochoa y contra el resto de investigados de la Acampada US por Palestina en este procedimiento judicial y el cierre inmediato del mismo, y trasladamos al Sindicato de Estudiantes nuestra solidaridad.

¡Con la represión no nos van a callar!
¡Si nos tocan a una, respondemos todas!
¡Derogación de la Ley Mordaza ya!